A lo largo de nuestra vida nos vamos marcando objetivos y ponemos todos los medios para conseguirlos. Sin embargo, en muchas ocasiones sólo miramos hacia adelante y dejamos pasar otras muchas oportunidades a lo largo del camino por no mirar a los lados.
¿Hacemos lo correcto?¿Deberíamos ampliar nuestra visión y, con ello, nuestra perspectiva? No siempre lo que está al final del camino es lo mejor, o lo que más nos conviene. Tenemos que aprender a mirar a ambos lados para disfrutar de todo lo que la vida nos pone al alcance.